Hoy voy a confesar una cosa, y es que resulta que uno de mis proyectos es una aventura de acción urbana con espías y salseo a tope. Con un tono bastante asequible y divertido pero con tintes bastante reflexivos en la perspectiva del narrador que me encanta y es muy cómodo para entrar a esta historia.
Llevo bastantes miles de palabras, pero entre ciertas rayadas a nivel personal y el estallido de las recientes tensiones geopolíticas me siento un poco incómodo porque en el lore del mundo de esa historia hay un peligro a pie de calle,.
Me da cosa que en nuestro mundo haya riesgo de que algo aún peor pueda suceder volviendo una trama relativamente relajada y con cierto intimismo en algo demasiado actual.
Supongo que el trabajo de escritor consiste en ignorar todo eso y seguir adelante, el proyecto debe fluir tal como es y merece el máximo cuidado y respeto.
Pero eso no quita que lleve semanas frenado, en una pausa para poder continuar con la fuerza que merece la obra.
Un saludo, espero que nos leamos pronto.
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